AVISO: Esta entrada puede provocar picores injustificados por todo tu cuerpo.
Mi amiga Pili vive desde hace unos meses en Nueva York y me ha hablado de un gran problema al que se enfrentan los neoyorkinos. Grande no… más bien minúsculo: los bedbugs (chinches de camas), una plaga que está picando al “primer mundo” y que parece que llega a España…
Los chinches de las camas (Cimex lectularius) viven, como su nombre indica, cerca de las camas de humanos, entre las arrugas del colchón o en muebles cercanos. Se alimentan de sangre humana con un procedimiento casi quirúrgico: tienen dos bocas, una inyecta saliva con anticoagulantes y anestésicos, la otra extrae la sangre. De esta forma pueden estar chupando sangre durante 5 minutos sin que el “huésped” se de cuenta (ya quisieran los chorra-vampiros de “Crepúsculo”…). La picadura molesta y pica muchísimo, tarda en detectarse y el 50% de las personas las achaca a otras causas. Por suerte no transmiten enfermedades (al menos algo "bueno").
El principal problema es que son nocturnos y casi indetectables, ya que pueden esconderse entre las grietas de la madera de las casas, de ahí que sean más prolíficos en países con este tipo de contrucciones. Las poblaciones de chinche de las camas han aumentado un 500% en unos pocos años. Aunque no se conocen las causas, se supone que es debido al aumento de los viajes internacionales (sobre todo desde países poco limpios como Inglaterra) y al uso de fumigaciones con insecticidas menos fuertes (afectan menos al ser humano y también menos a estos bichos).
En Estados Unidos, y más en ciudades como Nueva York, existe una verdadera psicosis con esta plaga (mapa de "avistamientos" http://bedbugregistry.com). Tanto es así que al alquilar un piso se exige un certificado como que el piso está “limpio” de Bed Bugs. Incluso ha hecho florecer nuevos negocios como los de los perros rastreadores de chinches, que por unos 300 dólares la sesión olfatean las viviendas e indican si hay o no chinches escondidos (por ese precio el perro debería ahuyentarlos, comérselos o llevárselos puestos…).
Para acabar con ellos no hay otra que quemar tu casa desde los cimientos contigo dentro empaquetar toda la ropa, lavarla por separado y fumigar la casa y los muebles, desalojando la vivienda durante unos días. Sólo así se está seguro (a menos que alguien cercano los vuelva a traer o tu vecino no haya fumigado su casa y te los pase como el que te presta la sal…)
Y para terminar de rematar… llegan a España:
Probablemente ahora iréis a mirar en vuestros colchones. Yo ya lo he hecho.
Que ustedes se rasquen bien…
Que ustedes se rasquen bien…
P.D: Iba a titular esta entrada “Bedbugs: te la chupan mientras duermes” pero iba a ser percibido como algo positivo entre el público masculino…
5 comentarios:
cof cof cof... a ver paxcual si te la chupan.. te la chupan...
por otro lado... se supone que si no te enteras de que te chupan... es por que no pica ni durante ni despues. Por eso hay gente q no se entera de su existencia ¿no? si fueran urticantes SI se daria cuenta la gente. ¿o que? si no mica ni nada... pos tio hagamos simbiosis. no viven los perros, gatos y pajaros domesticos de nosotros?
aceptemos estas nuevas mascotas sin discriminar tio!!!
Sí, las picaduras pican y molestan pero se achacan a otras causas.
Ay que grimica mare!
Venía a saludar a un paisano y casi que me voy con picores :D
Volveré a investigar más (con fumigador)
Un saludo
este tema es muy, muy serio... nos están invadiendo.
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